Querida comunidad:
En dos semanas más terminan las clases. Estamos en los últimos días de este año escolar, tiempo con evaluaciones y también con una serie de hitos que marcan el final de una etapa. Entre estos está la Prueba de Admisión a la Educación Superior que en muy pocos días más, del lunes al miércoles de la próxima semana, rinden nuestros alumnos de cuarto medio. Los apoyamos con nuestro cariño y oración.
Con respecto al año litúrgico, también nos acercamos al fin del "Tiempo Ordinario": este domingo es el último del "Tiempo Durante el Año", es la Solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo. El domingo siguiente será el "año nuevo litúrgico", que comienza cada año con el Adviento.
En este domingo de Cristo Rey, Jesús, en el capítulo 25 del Evangelio según San Mateo, nos dice cómo se nos va a evaluar para la admisión en el Reino de los Cielos: cada vez que socorremos a los más débiles, estamos ayudando al mismo Cristo, el Rey del Universo, y eso permitirá que seamos admitidos en el Reino de los Cielos: tuve hambre y me diste de comer; tuve sed y me diste de beber. Conectando este importante texto con la virtud de la humildad, pensemos que Jesús se identifica con las personas necesitadas: "cada vez que ustedes socorrieron a una de estas personas más humildes, conmigo lo hicieron". Para ser más humildes, tenemos que darnos el tiempo para conocer en profundidad con el fin de llegar a querer sinceramente a las personas con más necesidades y así ayudarlos en la medida de nuestras posibilidades, de una manera adecuada, no en forma paternalista, sino como fruto de un diálogo fraterno entre personas de igual dignidad, en el que todos los que participamos quedamos enriquecidos por habernos conocido.
Sigamos rogando por la humildad, que es la virtud que le pedimos a Dios por medio de su Madre durante este Mes de María.
Fraternalmente unidos en el Verbo Divino.
Sergio Edwards SVD
Jueves 23 de noviembre de 2023