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En la actividad, Ramos repasó su historia personal, su relación con Dios y el misterio de la fe que, de acuerdo con sus palabras, no es -simplemente- afirmar la existencia de un ser superior, sino que “es vivir la presencia cercana de Dios como camino hacia la plenitud de todo lo humano”.

El profesor y ex decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile también dio su parecer en torno a la situación actual del país, asegurando que aún falta mucho para alcanzar el tan anhelado desarrollo económico y que éste se consigue, mirando el ejemplo de países como Suecia, por ejemplo, que ha llevado a cabo políticas públicas exitosas. 

En materia ecológica, señaló que es muy importante redefinir la palabra progreso, antes de definir el uso que se les dará a los recursos naturales.  

También dio a conocer su faceta de ingeniero eléctrico, esa que todavía le hace creer en las ventajas de la tecnología, puesto que sigue convencido de que ella es el mejor elemento para terminar con la pobreza en el mundo. “En el caso de la automatización y el desarrollo tecnológico no es que no vaya a haber empleos y dinero para todos, sino que con el correr del tiempo uno va a tener que estar dispuesto a reconvertirse hacia nuevas tareas y funciones, y eso nos hará avanzar”, comentó.

Por último, sentenció que es necesario discutir los temas de forma concreta: “En el mundo actual esa es la manera de dialogar, con argumentos que apelan a la razón”, puntualizó.