06
junio 2022

Estimada comunidad:

Este es el primer lunes de junio, mes en el que este año se celebran varias solemnidades importantes para la espiritualidad verbita: ayer fue Pentecostés, el próximo domingo la Santísima Trinidad, el jueves 16 - que en Chile se traslada al domingo 19 - Corpus Christi y el viernes 24 el Sagrado Corazón de Jesús.

Durante este mes en Chile se celebra, ahora con un feriado, el Wetripantu, año nuevo mapuche. Nuestra congregación ha definido su misión durante el siglo XXI como "Diálogo Profético", con personas de otras religiones, culturas y diferente posición social. No es fácil el diálogo en estos tiempos de tanta violencia, pero es más necesario que nunca. Nuestra congregación en Chile acompaña al pueblo mapuche desde hace casi 50 años. A pesar de las dificultades, vamos a seguir esta misión. 

El Espíritu Santo, que en Pentecostés llenó el corazón de los apóstoles, les hizo capaces de dialogar con personas de otras culturas, porque la gente podía escuchar la predicación de Pedro y sus compañeros en su propio idioma materno. Recemos para que ese Espíritu de Dios nos permita a los chilenos entablar un diálogo que traiga la paz social a nuestro país, especialmente en la zona sur.


Jesús les había dicho a sus discípulos que "el Espíritu Santo les enseñará todo" (Juan). De hecho, les enseñó algo - obvio para nosotros, muy novedoso para los judíos de ese tiempo - que la salvación era para todos los seres humanos, para personas "de toda raza, pueblo, lengua y nación" (Apocalipsis). Esa universalidad la logra el Espíritu Santo. 

Tres de los preciosos vitrales de nuestra iglesia muestran la presencia del Espíritu Santo: en la creación del universo; en la Encarnación del Verbo Divino, y en Pentecostés. Vemos al Espíritu Santo descendiendo sobre María y los apóstoles, con lo que se cumplían las palabras del profeta del Antiguo Testamento - quien aparece en la parte inferior del vitral noreste - que "el Espíritu de Dios vendría sobre toda carne: hombres y mujeres, viejos y jóvenes, esclavos y esclavas" (Joel). El Espíritu Santo ya actuaba en el Antiguo Testamento, especialmente en los profetas; llenaba a Jesús de su presencia; vino sobre los discípulos en Pentecostés y los transformó en apóstoles, y siguió viniendo, como lo muestra el Libro de los Hechos de los Apóstoles, que nos permite ver lo que San Arnoldo Janssen percibió con claridad: que el Espíritu Santo es el verdadero protagonista de la Evangelización porque impulsa al misionero a salir de sí mismo y abrirse a los demás y,  también,  es quien abre a la fe el corazón de quienes reciben su mensaje.

Les invito a volver a leer el Libro de los Hechos de los Apóstoles, uno de los más entretenidos de la Biblia, buscando la expresión "Espíritu Santo" para ir aprendiendo cómo actúa esta Persona Divina en la vida de los cristianos.

Termino con una oración de San Arnoldo Janssen: "ante la luz del Verbo y del Espíritu de gracia desaparezcan las tinieblas del pecado y la noche de la incredulidad y viva el Corazón de Jesús en los corazones de toda la humanidad".

Sergio Edwards SVD
Lunes 6 de junio de 2022
Santiago de Chile, lunes 30 de mayo de 2022.