09
marzo 2023

Querida comunidad:

Hace poco más de una semana comenzaron las clases y ahora estamos llegando al horario normal. Sólo falta que empiecen las actividades extraprogramáticas, que comenzarán el 20 de marzo. Este año tendremos nuevos talleres, que buscan generar espacios que complementen la formación de nuestros alumnos, potenciando sus habilidades e intereses en activades de aprendizaje, entretención y sana convivencia.

Este domingo 12 de marzo, tercero de Cuaresma, en este año A, del ciclo trianual, se lee el Evangelio de la extensa conversación de Jesús con la mujer samaritana (Juan 4, 5-42). Para nuestra Congregación del Verbo Divino, que define su misión como Diálogo Profético, es un texto muy importante porque muestra a Jesús evangelizando por medio del diálogo que la samaritana reconoce que es con un profeta. Es uno de los ejemplos más claros de Misión como Diálogo Profético. Nuestro desafío en los colegios de la congregación sigue siendo traer esto al proceso de enseñanza y aprendizaje.

Jesús se muestra como un ejemplo de Maestro, de pedagogo. Él es quien toma la iniciativa de entablar el diálogo, y lo hace con una persona “lejana” o “distinta”: es un diálogo con una persona de otra cultura y de otra religión. El evangelista explica que los samaritanos y los judíos no se hablaban y más adelante nos dice que los apóstoles se extrañaban de que Jesús hablara con una mujer. En su diálogo, Jesús rompe barreras culturales.

Jesús comienza la conversación en una forma muy humilde: simplemente, pidiendo agua. Después va guiando este diálogo cambiando de tema, desde el agua de un pozo (que puede ser algo estancada) hacia el agua viva (por ejemplo, el agua de una vertiente), de ahí hacia un agua que quitaría la sed para siempre, lo que va atrayendo el interés de la samaritana hacia la persona y la enseñanza de Jesús. Más adelante Jesús pide a la mujer invitar a su marido, pues quiere ampliar este diálogo involucrando a la familia. El maestro no busca aislar a sus discípulos de su entorno familiar, sino hacer que estos también participen del proceso de enseñanza/aprendizaje. Y cuando el interlocutor dice una inexactitud, el formador se da cuenta, corrige y pone la verdad a la vista. En este caso, la samaritana no se enoja, al contrario, ella se admira y eso la hace darse cuenta de que habla con un profeta. Inmediatamente después pregunta por una de las grandes diferencias entre su pueblo y el de Jesús. El Maestro dice verdades no fáciles de aceptar para un samaritano, como “la salvación viene de los judíos”, pero eleva la discusión a otro nivel, diciendo que se acerca la hora en que a Dios se le adorará no en un lugar específico, sino “en el espíritu de la verdad”. Al final, ella se transforma en la gran misionera que atrae a todo su pueblo hacia Jesús.  

Termino invitándoles a que asumamos nuestra misión de educar y de evangelizar, lo que implica interesarse en las demás personas, romper el hielo de los prejuicios y buscar maneras de tomar la iniciativa de entablar un diálogo, lo que puede comenzar con una humilde petición de ayuda.

Fraternalmente unidos en el Verbo Divino,


Sergio Edwards SVD
Jueves 9 de marzo de 2023