30
mayo 2022

Estimada comunidad:

Estas últimas semanas hemos tenido, en todo Chile y en nuestra comunidad escolar, un alto número de contagios, de acuerdo a los test PCR. Pero muchas personas se hacen ahora un test de antígeno y se comienzan a cuidar sin que su caso quede registrado entre las cifras oficiales, las que debieran ser aún mayores a los actuales, con cifras nacionales sobre los siete mil casos diarios. Gracias a que la gran mayoría estamos vacunados (lo que no es fácil, pues a muchos les golpea dura cada dosis), el Covid19 no está teniendo la gravedad de hace dos años, y muchos lo pasan como un resfrío, en casos fuerte, en otros casos suave. A pesar de esto, debemos seguir cuidándonos. Es por esto que hemos debido “enviar cursos o generaciones enteras para la casa”, a continuar sus clases en forma telemática por algunos días. Agradezco a los profesores por su esfuerzo, a los apoderados por aceptar de buen grado tener que cambiar sus planes y a los alumnos por su disposición a seguir sus clases online, porque sabemos que no es lo mismo que en forma presencial. 

En estos días celebramos la Ascensión del Señor, que nos recuerda que después de aparecerse a sus discípulos por cuarenta días - según informa San Lucas en el Libro de los Hechos de los Apóstoles – Jesús sube al cielo. La liturgia nos aclara que lo hace “no para desentenderse de nosotros, sino para precedernos en nuestro peregrinar hacia la patria definitiva”. Antes de dejar corporalmente a sus discípulos, Jesús los envía al mundo, los transforma en apóstoles, en misioneros. Este episodio crucial en la vida de Jesús y de la Iglesia – el envío de los apóstoles al mundo - es atesorado especialmente por nuestra congregación misionera, por lo que es tema del vitral poniente de nuestra capilla, que muestra a los doce apóstoles sobre el mundo. Jesús no sólo los envía, sino que les promete estar con ellos hasta el fin del mundo. Esa presencia invisible, pero real, la expresa el vitral con el signo de las letras griegas X y P, las dos primeras de la palabra “Cristo” en el idioma en que se puso por escrito el Nuevo Testamento: XPI∑TO∑ (XPISTOS, que se pronuncia “jristos”). 

Nuestra misión en el colegio es que los alumnos aprendan conocimientos, adquieran habilidades, asuman valores y desarrollen virtudes, que los haga capaces de transformar el mundo para haya más justicia, la cual trae la verdadera paz. En esa misión, Cristo los acompañará porque Jesús nos envía al mundo a anunciar su mensaje y viene con nosotros, o también podemos decir, va dentro de nosotros en este peregrinar. Su presencia nos da la fuerza para superar obstáculos, desánimos, enfermedades, en esta misión por hacer de este mundo un lugar más libre, con más paz, basada en la justicia y el respeto, tanto a las personas como a la creación.

Fraternamente unidos en Jesús, el Verbo Divino que se hizo hombre para morir por nosotros, resucitar y subir al cielo para prepararnos un lugar.

Sergio A. Edwards V. svd
Santiago de Chile, lunes 30 de mayo de 2022.